miércoles, 3 de febrero de 2021

BAMBINO, Todo sobre él

 

Bambino nació en Utrera (Sevilla), el 12 de febrero de 1943, su voz, tras treinta años de galas y actuaciones, le fue definitivamente abandonando y cinco días después del último homenaje, el 5 de mayo de 1999, a consecuencia de un cáncer de garganta, falleció en la casa de su hermana María en el barrio de El Tinte de Utrera. Al día siguiente fue enterrado tras un funeral en la iglesia de Santiago al que asistieron más de dos mil personas.  

Su nombre auténtico era Miguel Vargas Jiménez, pero siempre será recordado como Bambino, un apodo artístico que le fue impuesto por el público el mismo día de su presentación, cuando en el año 1961 el joven cantante abandonó la peluquería en la que trabajaba y comenzó a actuar en la Venta Real de Antequera. 

Allí cantaba una versión gitana y flamenca del Bambino que había popularizado el inefable Renato Carosone, y el éxito de aquella interpretación, que cada noche tenía que repetir varias veces, marcó para siempre su trayectoria artística. 

En aquel mismo instante, Miguel pasaría a ser una persona anónima, y Bambino comenzaría a conocer las mieles del éxito, pero no tuvo una carrera fácil, nunca fue un artista de multitudes, entre otras cosas porque él se crecía como artista en los pequeños tablaos, lugares con duende y solera en los que podía sentir el calor de un público entregado a su original arte. 

Bambino se adelantó a su tiempo, quizás tal vez el país, que despertaba a los ritmos yé-yé, no estaba preparado para escuchar aquellas desgarradas canciones de amores canallas. 

La de Bambino es una obra incomprendida que hoy, más vale tarde que nunca, está siendo reivindicada por la nueva generación de músicos, pues el mismísimo Enrique Bunbury, ha confesado en más de una ocasión su admiración por el cantante sevillano. 

Eran canciones de amores oscuros y prohibidos que brillaban en su voz trasnochadora un artista que tenía el don de transcribir cualquier melodía a ritmo flamenco, da igual que fuese un bolero "Adoro", una copla "Mi amigo" o la más tierna canción de desamor firmada por el mismísimo Manuel Alejandro "Procuro olvidarte". 

Fue un precursor en la fusión del flamenco, pero además con el encanto de que ese mestizaje salía de su garganta de una manera espontánea, absolutamente natural, de ahí que hoy sus grabaciones mantenga viva toda la fuerza y magia con que fueron concebidas en su momento, un gitano que rompió normas y llevó la copla hacía la exageración, hacia el drama más desolado. 


Desde 2005 su figura en bronce preside la plaza de la Trianilla, en Utrera, y al cumplirse el décimo aniversario de su muerte se desarrolló en su pueblo natal una semana cultural, "Diez años sin Bambino", con el objetivo de recordar su legado y de extenderlo a los jóvenes aficionados al flamenco. 

A continuación pueden disfrutar si lo desean de las canciones que componen estos seis álbumes. 

¡Que disfruten con su música!. 

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Año 1967
Está compuesto por estas catorce canciones:  
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Año 1968
Está compuesto por estas doce canciones:
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Año 1969
Está compuesto por estas doce canciones
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Año 1971 
Está compuesto por estas doce canciones:
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Año 1973
Está compuesto por estas diez canciones
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Año 1973
Está compuesto por estas catorce canciones
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